Siembra tus propias semillas de alegría

Cómo puedes tener más alegría en tu vida.

La verdadera alegría puede cultivarse y cosecharse cada día y en cada momento de nuestra vida. Sólo hay que escoger muy bien las semillas y elegir las actividades que te permiten estar más alegre.

¿Qué te hace sentir alegre?, ¿Cuáles han sido los momentos más alegres en tu vida?, ¿Cómo puedes crear alegría en situaciones difíciles?

Algunos de los momentos más alegres de mi vida han sido sesiones de chistes contados entre amigos.

Otros momentos alegres han sido los paseos, las excursiones, los viajes y caminatas, sobre todo cuando he tenido apertura a las sorpresas e imprevistos.

También he encontrado alegría cuando he jugado con las palabras y he hecho broma con lo que podría haber sido dicho de manera escueta o seria.

¿Cómo pones alegría en tu vida?

La verdadera alegría es un sentimiento grato e intenso que naturalmente se exterioriza. Tú ves una persona alegre e, inmediatamente, notas la diferencia, aunque no se esté riendo; cuando tú estás alegre, fácilmente tu estado es contagioso y transmites alegría a otros.

Aunque es muy cierto que la alegría de vivir es el resultado de nuestra salud mental y de una vida recta, quiero compartir contigo dos perspectivas: la de largo plazo, es decir, cómo cultivas las semillas de la alegría para que den frutos duraderos y sostenibles, no perecederos; la de corto plazo, esto es, cómo creas alegría en tu situación presente.

Cultiva semillas de alegría

Sin necesidad de ir a la tienda de productos agrícolas, hay dos clases de semilla cuyos frutos son la alegría duradera: la generosidad y el optimismo.

Generosidad: te invito a que vivas y construyas tu alegría actuando en favor de otras personas desinteresadamente, aunque te cueste un esfuerzo; tu actuación generosa te recompensará en el momento y a largo plazo.

Optimismo: Confía en tus propias posibilidades, y en la ayuda que te pueden prestar los demás, de manera que puedas destacar lo que es positivo en sí y las posibilidades de mejora que existen en cualquier situación; tu optimismo será fuente de inspiración y la manera más efectiva de intervenir en las situaciones difíciles.

Si cada día siembras semillas de generosidad y optimismo en tu vida, y las riegas con una actitud serena y fresca, puedes estar seguro de que tendrás los frutos de la alegría de vivir durante mucho tiempo.

El largo plazo está determinado por el hecho de que una vida virtuosa o recta genera esa alegría “íntima y perpetua”: sus frutos los puedes cosechar de manera inmediata y, también, son muy duraderos.

Crea alegría aquí y ahora mismo

Tu mejora personal, en términos de crecer en paciencia, generosidad y optimismo, puede ser animada y reforzada, por la creación de momentos de alegría en tu vida presente.

Lo único que requieres es tener la intención de vivir de un modo más alegre tu rutina, tus estudios, tu trabajo, tu comunicación con los demás.

Cuatro actividades pueden ayudar a crear más alegría en el día a día de nuestras vidas: juego, ingenio, ocio y movimiento. Estas actividades son compatibles con tu ocupación, tu estudio o tu trabajo; de hecho, es estos escenarios que debes integrarlas para que sean más eficaces.

Movimiento: estírate, respira y camina; haz deporte o ejercicio; tu cuerpo en movimiento es alegría pura. Acepta las situaciones como se presentan, fluye con ellas sin desgastarte, oponiendo resistencia, y encuentra el momento apropiado para salir de las dificultades o para transformar lo que debas cambiar.

Juego: asegúrate de entretenerte sanamente con actividades recreativas o deportivas; diviértete con gestos, dichos, ocurrencias y chistes; encuentra el lado gracioso a cada situación.

Ingenio: ponle chispa a tu día a día; encuentra y cuenta rápidamente el aspecto gracioso de las cosas; cultiva un arte, un oficio o un pasatiempo con dedicación pero sin imponerte reglas rígidas que te agobien.

Ocio: encuentra momentos para no hacer nada, relajarte, descansar y vivir la quietud creativa en tu vida. Tómate un café, un té o un vino, escuchando música y percibe simplemente lo que pasa a tu alrededor. Vaga sin rumbo fijo por las callejuelas de tu ciudad o por un parque lleno de frescor.

Multiplica tu alegría

Cuando siembras las semillas de la alegría, generosidad y optimismo, y tienes espacios de movimiento, juego, ingenio y ocio en tu vida, te estás haciendo responsable de tu propia alegría y contribuyes a generar más alegría a tu alrededor.

¿Por dónde quieres comenzar a crear más alegría en tu vida y en la de quienes amas?

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